por Mónica Retamal F.
Directora Ejecutiva de Fundación Kodea
Son tan apetecidos que son transportados en camiones blindados y con medidas de seguridad equivalentes a la de los diamantes. La industria mundial de la IA y sus 40 mil clientes hacen fila para conseguirlos y la lista de espera sólo crece. Son los famosos GPUs o chip de computación acelerada de la empresa Nvidia que hoy dominan cerca del 80% del mercado y son claves para los complejos cálculos matemáticos de la IA. Los mismos que han convertido a esta compañía estadounidense – hoy la más valiosa del mundo y parte de las 7 avaluadas en más de US$1 billón – en la piedra angular de esta nueva revolución.
A diferencia de otras Big Tech, Nvidia, buscó durante 30 años -con varios amagos de quiebra- la llave del éxito. Su capacidad de adaptación se atribuye al particular estilo de gestión de su fundador, el taiwanés Jensen Huang, quien predica el valor de la resiliencia y de una organización horizontal.
Pero el éxito de Nvidia también convive con una gran amenaza, porque su principal fábrica de semiconductores está en Taiwán, isla constantemente amenazada por China. La llamada «guerra de los chips» -batalla diplomática, política y económica- plantea que quien controle la fabricación de semiconductores, será quien detente la supremacía militar y el desarrollo industrial futuro. Estados Unidos -desplazado por Asia en su producción- busca diversificar los lugares para producirlos, incluso mencionando a Latinoamérica como opción para instalar industrias nearshore.
Si hablamos de ‘la capacidad de cómputo chilena’, la infraestructura local es precaria y más bien de cómputo tradicional, porque los modelos de IA requieren un uso intensivo de GPUs y en nuestro caso sólo tenemos acceso a través de la nube. Si bien, aún contamos con algunas oportunidades potenciales en comparación a la región, lo clave es asegurar esta ventaja con una fuerte inversión en más y mejor infraestructura, algo que estaría considerado en el Plan Nacional de Data Centers que el gobierno presentará en este segundo semestre y que podría potenciar un desarrollo más masivo de IA en el país.
