“TransporteDigno”: Campaña busca visibilizar el drama por la falta de buses en zonas interurbanas como Maipo, Talagante y Melipilla

- Habitantes de esas comunas cuentan el drama diario que sufren para poder trabajar, estudiar y recibir atención médica por no tener cómo movilizarse.
20, 30, 40 minutos y hasta más de una hora. Todo ese tiempo la cámara registra a mamás con sus hijos, adultos mayores, trabajadores y estudiantes, esperando locomoción en un paradero de latón en El Romeral, comuna de San Bernardo.
Es una escena habitual que se ve a diario en esta localidad ubicada a 48 kilómetros de la ciudad de Santiago. Es la misma situación que afecta a otras zonas interurbanas como Talagante y Melipilla: falta de buses y de locomoción por un deficiente servicio de transporte público. Tímidamente, las personas se acercan a la cámara de grabación y cuentan el drama diario que les implica esperar y esperar buses o colectivos, con frío, lluvia o calor sofocante.
Bernardita, acompañada en el paradero por su hijo de 8 años que padece Trastornos del Espectro Autista (TEA), ya resignada, cuenta cómo es su vida cotidiana: “Tengo que salir una hora antes de mi casa para poder tomar el colectivo. Tuve que dejar de trabajar por lo mismo”. Dice que, si el colectivo no pasa, debe caminar todo el trayecto mientras pasan camiones y autos por su lado. “Mi hijo se cubre sus orejitas para no escuchar el ruido”.
Frente a esta urgencia social, surgió la campaña #TransporteDigno. Uno de sus promotores es el diputado Juan Irarrázaval (Republicano), quien integra la Comisión de Transporte en el Congreso. “Las comunas rurales no pueden seguir en el abandono, necesitamos un transporte digno que le permita a las personas poder llegar al trabajo, a la escuela, al consultorio, terminar los estudios secundarios y volver a la casa a descansar”, señala.
El problema es tan grande, que lo que partió como una campaña fue creciendo, sumandos personas y se está transformando en un movimiento ciudadano. Levantaron un sitio web, donde recogen las demandas de las personas, algunas de las cuales graban sus testimonios en cámara denunciando las deficiencias del transporte.
“Es una iniciativa de participación ciudadana. Buscamos conocer de mejor manera la realidad que vive cada familia de las provincias del Maipo, Talagante y Melipilla para alcanzar una micro, un colectivo o el metrotrén”, agrega el legislador.
El tema también preocupa a los expertos. Felipe Ulloa, ex consultor de la Cepal en Infraestructura y Desarrollo, plantea que “el Transantiago que actualmente se llama RED (pero nadie todavía internaliza el nombre) gasta 2.000 millones de dólares al año en subsidios… y ¿qué ocurre con el resto de las provincias de la RM que están alejadas de la capital? ¿Qué pasa con Talagante y con Melipilla, Padre Hurtado, Peñaflor, Isla de Maipo, Paine y Calera de Tango? El transporte Público fuera de la provincia de Santiago representa una disparidad regional o una desigualdad socio–territorial, vale decir, que hay una discriminación desde el punto de vista del Estado hacia esas comunas que no pertenecen a la jurisdicción principal. ¿Por qué no les estamos mejorando la movilización? Además, tampoco sabemos qué pasa con los recursos del subsidio”.
Entre las principales demandas, los habitantes de estas comunas piden una extensión del Sistema RED (ex Transantiago) para algunas zonas con continuidad urbana como Buin y Talagante, buses de acercamiento e integración tarifaria del tren desde Paine a Santiago y que los buses que vienen hacia o desde las provincias de Talagante, Maipo y Melipilla hacia Santiago tengan una terminal de parada en estaciones de Metro como Cerrillos, Estación del Sol, o la Estación Pajaritos, para así acortar los tiempos y costos de viajes.
Las demandas fueron plateadas por el diputado Irarrázaval al Gobierno en una reunión que sostuvo con el ministro de Transporte, Juan Carlos Muñoz. En esa instancia, se insistió que en el trazado del futuro tren de Santiago a Valparaíso se contemple una estación en Curacaví.
Por ahora, los habitantes de estas zonas rurales no tienen más alternativa que seguir denunciando el problema a la espera de una solución. Es el caso de Franco, un estudiante de María Pinto que trabaja y estudia en Santiago. Creó en Instagram la @transportepara_mpinto para dar cuenta de los problemas de transporte que afecta a su localidad: “Las personas viajan hacinados y tenemos que salir a la autopista a ver si nos para alguna micro. Hay lugares rurales que no llega nadie. Yo no puedo viajar de noche prácticamente. Y así muchas personas se tienen que quedar en la casa de familiares para poder volver o poder estudiar. No es posible”.