Mercado financiero no se alinea con el Banco Central y espera una nueva alza de tasas en diciembre
El Banco Central subió la Tasa de Política Monetaria (TPM) en 50 puntos base este mes, llevándola hasta 11,25%, señalando que con esto llegaba al nivel máximo del ciclo iniciado en julio de 2021 y que se mantendría en este valor por el tiempo necesario para asegurar la convergencia de la inflación a la meta en el horizonte de política de dos años.
Sin embargo, las expectativas implícitas en las tasas swap –instrumentos financieros- del mercado no suscriben ese lineamiento que entregó el ente rector, ya que esperan un alza de hasta 75 puntos base en la próxima Reunión de Política Monetaria agendada para el 6 de diciembre, con lo cual la tasa podría situarte en 12%.
De allí en más, las expectativas de los instrumentos financieros esperan una mantención en 12 % hasta marzo de 2023, para luego, en la reunión de abril, iniciar el proceso de bajas. Para ese mes prevén un recorte de 75 puntos base, dejándola en 11,25%, y en julio otra reducción, para llegar a 11%. Así, las tasas de mercado esperan que la TPM finalice el año en 9,75%, por lo que prevén una lenta reducción de la tasa rectora del mercado.
Sin embargo, economistas consultados se inclinan más por la visión que entregó el Banco Central y por ello coinciden en que no esperan nuevas alzas.
Felipe Alarcón, economista de EuroAmerica, sostiene que “creemos que la TPM ya está en un nivel suficientemente contractivo como para contener el escenario inflacionario, el que debiese iniciar un ciclo de reducción, alineado con una economía que entrará en recesión”.
Misma opinión entrega el economista de Bci, Felipe Ruiz, quien sostiene que espera que “no habrá más incrementos en TPM en este ciclo y los desarrollos recientes han ido reafirmando esta visión”.
Marco Correa, economista jefe de Bice Inversiones argumenta que “por ahora estimamos que el BC cumplirá lo señalado en su último comunicado, manteniendo el nivel de 11,25%. Un alza adicional así de marginal a estas alturas la verdad que no tendría mucho sentido, entendiendo que el efecto no es inmediato y comprometería innecesariamente la credibilidad del BC”.
Uno que se alinea, en parte, con las tasas swap es el decano de la Facultad de Administración y Negocios de la Universidad Autónoma de Chile, Rodrigo Montero: “Si uno atiende, por una parte, al reciente Informe de Política Monetaria (IPoM), en particular, al corredor para la tasa de política monetaria, y por otro lado, al último comunicado de política monetaria, en términos de que el ente rector se compromete a conducir su política monetaria con flexibilidad, no descarto un nuevo incremento en la tasa de interés. Con todo, me parece que hay muchos riesgos asociados a continuar incrementando la TPM puesto que la profundidad de la recesión puede terminar siendo mayor de la necesaria”.
Asimismo, si bien coinciden en que la reducción de tasas comenzaría entre fines del primer trimestre y principios del segundo esperan una reducción más rápida que la implícita en las tasas swap. “Creemos que la reducción de la TPM se iniciará en marzo 2023, con recortes relativamente robustos”, dice Alarcón, quien añade que “ve una tasa de interés en 2023 en 5,75% y 5,0% a fines de 2024″.
Ruiz asevera que “el primer recorte en TPM se efectuaría en abril con una reducción de 75pb, para luego observar recortes de igual magnitud en los trimestres siguientes y terminar 2023 con una TPM en 7,5%. Hacia diciembre 2024, incorporamos una TPM en torno a 4,0%”.
Y Correa prevé que “nosotros estimamos que hacia fines de 2023 la tasa de interés estará en niveles de 7,5%, mientras que hacia 2024 estaría en 4,5%. Esto entendiendo que el nivel neutral es cercano a 3,5% y que mantener la tasa sobre este nivel por más tiempo puede tener mayores consecuencias negativas en la actividad de lo necesario para contener la inflación”.
Fuente: La Tercera.