Senador Castro a la espera de pronunciamiento de Comisión de Venecia: “Su opinión es importante y los convencionales deben poner atención”
Luego que la Comisión de Venecia designara a los cinco integrantes que analizarán las propuestas de la Asamblea Constituyente, esto tras el oficio presentado a principios de enero por el Senado para que se pronuncie sobre temas relevantes de la nueva Constitución -como el unicameralismo, el quórum de 2/3 o la eliminación del Tribunal Constitucional, entre otros-, los parlamentarios nacionales están a la espera de que el organismo internacional solicite reuniones con las autoridades locales (incluidos los constituyentes), las partes interesadas y la sociedad civil que le permita avanzar en el proceso de recopilación de información para dar su opinión sobre el proceso constituyente chileno.
Para el senador por la Región del Maule, Juan Castro Prieto, quien lideró la iniciativa que fue firmada y patrocinada por 21 parlamentarios más, “la Comisión de Venecia es un órgano internacional especializado en revisar, orientar y ayudar en la formación de las constituciones de diferentes países que forman parte de esta entidad. Chile es parte desde 2005, entonces como órgano internacional siempre es bueno tener la opinión de ellos, sobretodo porque la Convención nuestra se ha transformado en una organización en la que se habla de todo, y la verdad es que uno escucha a algunos convencionales que hablan muchas incoherencias y si queremos tener una buena Constitución, debemos tener también una buena revisión de lo que saldrá”.
En el mismo sentido, el parlamentario agregó que “es razonable que uno como senador pida que esta Comisión revise los temas que son más importantes. A nosotros nos interesa mucho que la Convención tenga en su eje principal la defensa de la democracia, por ejemplo, que es un tema muy necesario, y que la Comisión de Venecia se refiera sobre la situación del Tribunal Constitucional, que para mí es un órgano muy valioso porque nos revisa y nos centra a quienes hoy día legislamos de que no salgamos de un cierto marco que la ley nos permita. Por estas razones sentí que era muy necesario que se revisara este trabajo, y no siendo vinculante su decisión, es una institución muy prestigiosa y que obviamente su opinión será muy importante, por lo que los convencionales deberían poner atención a esos comentarios”.
Respecto al apoyo parlamentario que recibió para sacar adelante esta iniciativa, Castro sostuvo que “esto lo pude haber presentado solo, pero cuando comencé a conversar este tema con otros senadores, encontraron que era bastante interesante y se fueron sumando porque estamos todos preocupados y bien atentos de que de la Convención salga algo muy interesante. Firmaron 21 senadores más esta petición, y para que fuera oficial debió pasar por la presidencia del Senado. Estamos tranquilos porque sabemos que esta Comisión va a hacer una buena revisión y dará algunas indicaciones, sugerencias, que los convencionales no podrían dejar de prestar atención a esa opinión”.
En este punto, castro explicó que “durante la historia nuestro país ha tenido un Parlamento bicameral, ha sido una herramienta que se ha usado bien, entonces no sé qué pasaría si tenemos solamente una cámara. La legislación de nuestro país tiene una forma y cambiarla de la noche la mañana quizás es muy perjudicial para todos y para la democracia, por lo que esperamos que la Comisión nos oriente y señale lo que nosotros deberíamos mantener como país. Lo otro que también se debe entender es que los senadores somos representantes de las regiones, y qué pasa con estos representantes que ya están elegidos, se acaban de elegir senadores por ocho años más, y esos son temas importantes que se deben revisar pero con una mirada ordenada, de largo plazo, mantener los equilibrios políticos y democráticos que el país necesita para seguir avanzando”.
Finalmente, cabe destacar que la Comisión de Venecia reúne a más de 60 países y tiene como propósito fundamental proveer consejo jurídico a sus Estados miembros, así como colaborar con Estados no miembros y organizaciones internacionales interesadas, en cuanto a reformas constitucionales y legales sobre la base de los estándares democráticos europeos y la experiencia internacional, contribuyendo a diseminar las buenas prácticas en materia de instituciones democráticas, sistemas de justicia, y derechos humanos y libertades fundamentales.