Un futuro prometedor: por qué la pandemia obligó al empresariado chileno a ser más sostenibles

Un reciente estudio elaborado por Accenture y el World Economic Forum, estableció que las intenciones de las empresas de ser más sustentables y responsables creció de un 65% en el año 2019 al 73% el 2020. Tendencia que de alguna u otra forma, se ha ido expandiendo en el entorno emprendedor y empresarial chileno.
La sostenibilidad se ha transformado en un enfoque de negocios que cada día tiene más empresas adherentes que, junto a ofrecer beneficios económicos, también buscan tener un impacto social y ambiental positivo con sus operaciones. Esta tendencia mundial, ha entrado fuertemente en el empresariado chileno, generando un gran cambio en un corto plazo. “Sorprende ver que actualmente la mayoría de las campañas de marketing de las empresas en Chile se están basando en atributos de sostenibilidad para posicionar a sus marcas y son varias las empresas que se están poniendo metas ambiciosas de carbono neutralidad o de implementación de modelos de economía circular para el mediano y largo plazo.”, comenta Felipe Machado, Director de Gudcompany.
Bajo esta misma línea, el estudio de Accenture, estableció que los equipos que tienen liderazgos con foco en la sostenibilidad son más capaces de aportar un mayor valor financiero a su compañía. “La pandemia evidenció que a nivel nacional, las empresas comprometidas con criterios de sostenibilidad han tenido un mejor desempeño financiero durante la crisis en comparación con sus pares que no reportan análisis sobre su desempeño medioambiental, social y de gobernanza” añade Machado, quien también señala que “la pandemia, ha sido vital para que el empresariado y el emprendedor chileno se replantee sus relaciones con su entorno y con sus grupos de interés.”
A tan solo tres meses del cierre de año, para el Director de Gudcompany, es importante que las empresas definan sus estrategias de cara al 2022. “ Hacer Planificación Estratégica hoy implica ir más allá de desarrollar planes de corto, mediano y largo plazo. El contexto de crisis y de incertidumbre exige pensar en otros escenarios que obligan a la incorporación de otras variables menos habituales, como aquellas de carácter político, sociales, culturales, tecnológicas y ambientales, entre otras. Es decir, de una estrategia que mantiene conciencia plena de lo que está sucediendo en el presente.”