“Ha sido bastante difícil y hoy efectivamente las mujeres no están recuperando sus trabajos porque no pueden”

Nicole Verdugo, presidenta de la Cámara de Mujeres y Negocios de Chile
Nicole Verdugo, actual presidenta de la Cámara de Mujeres y Negocios de Chile y Directora de Women Economic Forum en nuestro país, es una de las arduas defensoras de su género en Chile. Actualmente, como parte de su trabajo vive diariamente las problemáticas que abordan las empresarias en la situación actual, ya que debido a la pandemia muchas han entrado en una crisis económica profunda y, por otro lado, el rol de la mujer se ha visto excedido por las distintas tareas que les ha tocado asumir.
“Ha sido bastante difícil producto de que no se ven otras realidades, que hoy efectivamente las mujeres no están volviendo a recuperar sus trabajos porque no pueden”, asegura la ex funcionaria del Programa de Mejoramiento de Gestión de Género en la Subsecretaría de Relaciones Económicas Internacionales -dependiente de la Dirección Económica del Ministerio de Relaciones Exteriores-, por lo que día a día desde la Cámara entregan acompañamiento y apoyo mediante actividades y capacitaciones a diversas mujeres.
Bajo este contexto, en una extensa entrevista con E-negocios, Nicole aborda el impacto que ha tenido la mujer en esta pandemia, las formas de poder emprender en este escenario, las acciones que están tomando como organización y un análisis del panorama nacional respecto a la participación de mujeres en emprendimientos. Además, nos aventura las próximas actividades a realizar, entre otros temas.
-¿Cómo se han visto impactadas las mujeres con la pandemia? ¿Cuáles son los rubros que considera más afectados?
En primer lugar, quiero comentar que las mujeres han sido las que más han sufrido, primero con el estallido social, después con la pandemia desde el punto de vista de la crisis sanitaria y también con la crisis económica. Principalmente las mujeres han sido impactadas porque sus emprendimientos eran más vulnerables, además se encuentran en sectores donde hay mayor impacto. Inciden las cuarentenas, el tema del trabajo, los niños en la casa, el cuidado de hijos enfermos y adultos mayores, ha sido una labor que ha recaído sobre ellas, sumado a las tareas que ya tenían. Efectivamente, ellas han sido las más impactadas.
En este escenario, los rubros más afectados han sido la artesanía, la gastronomía y el turismo. Otro tema importante del por qué han sido tan afectadas, es porque entramos en una época 100% digital y muchos de los emprendimientos de mujeres no estaban digitalizados: no tenían página web, no tenían e-commerce ni medios de pago, y todo eso afectó muchísimo a las empresas vendedoras.
-¿Cuál es su recomendación para las mujeres que quieren emprender?
Hoy el tema del emprendimiento tiene que ver con las oportunidades. Dos recomendaciones súper importantes: primero buscar oportunidades que estén en este minuto, potencial para escalar y los negocios puedan crecer. A veces nos enamoramos de cosas que vemos o que hacemos, las que efectivamente no tienen un potencial económico. Para vender, lo primero que yo diría es buscar oportunidades, después de eso, tener una idea de negocio, generar un plan, buscar la digitalización en ese plan de negocios y poder construir un producto que pueda ir creciendo. Debe tener escalabilidad, potencial de reproducirlo, que no depende solo de la mano de obra, que puedas contratar personas, y así pensar no solo en chiquitito como un emprendimiento de sobrevivencia, sino pensar también a futuro y de cómo me veo de aquí a un año, cinco años, eso es súper importante. Y siempre pensar desde esa mentalidad, empoderarse, creerse el cuento, buscar oportunidades y buscar todo lo que es capacitación y ponerlo al servicio de tu negocio.
-¿Qué le parecen las medidas que ha tomado el gobierno para ir en ayuda de emprendedores, pymes y de las mujeres? ¿Van en el camino correcto?
En general ha faltado ayuda. Ahora recién vemos este proyecto que apoya a las pymes, y todavía los emprendedores no han podido dimensionar que efectivamente tiene una letra chica. Vemos que al menos tiene que tener gente contratada y muchos de los emprendimientos de las mujeres no necesariamente la tienen permanentemente, debido a que generalmente funcionan colaborativamente, y se van a quedar sin ningún tipo de ayuda. Por otro lado, creo que en algunas instancias que se han entregado algunos beneficios en pro de las mujeres, por ejemplo el subsidio al empleo, que tiene un foco de una ayuda superior, le ha faltado la perspectiva de género, que no tiene que ver con hacer cosas que tengan nombre que diga “mujer”, sino en toda su dimensión. Cuando estamos buscando que vuelvan al mundo del trabajo, es bastante difícil, porque no pueden. No saben con quién dejar a sus hijos, a los enfermos, a los adultos mayores, y hoy tenemos una disyuntiva, y por eso es importante generar programas que puedan apoyar al emprendimiento de mujeres. Hay muchas iniciativas que se han visto a través de Sercotec, Corfo, Fosis y de otros instrumentos, pero que no les están llegando por desconocimiento. Entonces, es relevante generar una comunicación, llegar a la población, llegar a los emprendimientos, para que puedan acceder de forma fácil.
Creo que ha habido incentivos, pero ha faltado mucha ayuda y no solo a las mujeres, sino a las pymes, que están de verdad devastadas. Acá no hay certidumbre de lo que viene hacia el futuro porque para emprender uno tiene que tener la seguridad que te van a comprar. Lamentablemente no sabemos cuándo va a terminar la pandemia, y si no tenemos la certeza de parte del gobierno, es muy difícil. Los emprendimientos de mujeres son bastante vulnerables, y están en sectores muy afectados, yo creo que eso no lo han podido dimensionar en ninguna de las políticas públicas impulsadas por el gobierno.
-¿Qué acciones y medidas han tomado como Cámara de Mujeres y Negocios de Chile para ir en ayuda del sector?
Mediante dos formas. En primer lugar, con respecto a nuestras socias, hemos tratado de apoyar a través de reuniones de networking, que era algo bien importante, y crear espacios de colaboración y asociatividad entre ellas, que les permite poder ayudarse.
Tenemos un programa que se llama “Socia ayuda a socia” y entre afiliadas que tienen servicios de abogados, de consultoría, coach, contabilidad y auditoría, han puesto su servicio para ayudarse mutuamente. Por otro lado, Mujeres y Negocios tienen tres pilares fundamentales de apoyo: el primero es la formación empresarial y, desde ese punto de vista, hemos tenido ciclos de talleres de formación de digitalización, instrumentos y herramientas para poder postular a fondos, y poder hacer más eficiente los negocios. Cuando entramos al mundo del teletrabajo, realizamos talleres para ayudar a los emprendedores a digitalizar su empresa, y esto surgió, porque muchas de ellas todavía no estaban 100% digitalizadas. Esto último, fue una transformación rápida para que no siguieran teniendo pérdidas, y fue extensivo al resto de la comunidad.
Otro pilar de la Cámara es la conexión empresarial y tiene relación con el networking, el hacer redes entre socias, generar nuevas conexiones e invitarlas a participar a distintos eventos. En el pasado Summit de Mujeres y Negocios, fuimos patrocinadoras y parte de una feria virtual muy interesante, donde hubo más de 40 emprendimientos. En este centro de convención virtual, las participantes pudieron visitar sus emprendimientos, además de estar presentes en algunas actividades de relacionamiento, ruedas de negocios, entre otros. Nuestro tercer y último pilar es potenciar los negocios de las socias realizando una amplia difusión, en fechas como el Día de la Madre, Día del Niño y Navidad.
Como consecuencia, de los emprendimientos que estaban afectados y que efectivamente dejaron de tener sus tiendas presenciales, hoy día están mostrando sus productos a través de catálogos y otros medios, y es ahí donde los hemos estado reforzando.
Anteriormente, teníamos muchas actividades presenciales y actualmente tratamos de suplirlas a través un grupo de WhatsApp, formando una comunidad y en donde todas las emprendedoras se apoyan y retroalimentan con información. Además, estamos patrocinando un programa que se llama “Mujeres In”, el cuál está dirigido a la macro zona norte, donde hemos capacitado a más de cien emprendedoras.
-En un plano más general, ¿cómo ve el panorama nacional respecto a la participación de mujeres en emprendimientos o el mundo laboral? ¿Sigue existiendo una brecha muy grande en Chile?
Anterior a la pandemia y al estallido social ya teníamos una brecha bastante significativa por lo menos en el mundo laboral. Nos vemos enfrentados a un retroceso de casi 10 años. Volver a poder considerar un avance, es tarea de todos y muy importante en el proceso de la reactivación económica. Necesitamos que las mujeres vuelvan a integrarse, y muchas de ellas son jefas de hogar y homoparentales en muchos casos, entonces, se necesita apoyo para poder reinventarlas y darles oportunidades. Ver que el emprendimiento va ser una de las columnas vertebrales para la reactivación económica.
– Teniendo en cuenta que el 50% de las mujeres no trabaja, ¿Cuál es su opinión de los emprendimientos informales que han surgido en pandemia?
Es preocupante la formación de los emprendimientos informales, ya que en general surgen sobre todo en estas instancias. Anterior a la pandemia, solo el 48% estaba en el mundo del trabajo y yo creo que al menos hemos retrocedido en un par de puntos porcentuales con respecto a lo que teníamos el 2019. Hay muchos emprendimientos que son informales y eso no les permite pensar en la escalabilidad de sus proyectos, hacerlos crecer, y pensar en que pueda ir creciendo y que pueda proyectarse a una empresa. Para que eso ocurra, tiene que formalizarse, digitalizarse, y eso les va a permitir acceder a fondos, acceder a cuenta corriente, a poder postular a beneficios para las pymes, tener sus declaraciones de renta y, por consecuencia, acceder a mayores beneficios bancarios y de financiamiento. Como Cámara estamos enfocadas en eso, en que las mujeres puedan formalizarse y hacer crecer sus negocios.
-¿Cree que se está haciendo un buen trabajo en cuanto a políticas públicas para empoderar a la mujer y potenciar sus iniciativas de negocios o participación en campo laboral?
En general, hace mucho tiempo se viene trabajando desde las distintas dimensiones de las políticas públicas en incluir el enfoque de género. Eso me parece interesante, hemos avanzado muchísimo con respecto a unos 10 años atrás. Pero esto es un proceso que ha ido sobre todo asociado a los programas de medición de gestión del gobierno. Siento que aún falta, falta crear políticas públicas que de verdad potencien el fomento productivo de las mujeres, la industria nacional, sobre todo de emprendimientos que puedan ir asociados a cadenas de valor. Es insuficiente, y tenemos mucho espacio para poder crear, sobre todo entregando capacitaciones que estén creadas sobre lo que de verdad necesita el mercado.
-En el plano más personal ¿cuáles son sus planes a mediano plazo en cuanto a proyectos personales o profesionales?
Quiero contarte que este año fuimos nombradas, junto a dos socios de la Cámara de Mujeres y Negocios, como directoras del Women Economic Forum en Chile. Eso nos tiene muy motivadas y contentas de traer esta entidad a nuestro país. Junto con el patrocinio de la Cámara de Mujeres y Negocios, en el mes de marzo tuvimos un evento maravilloso, donde sumamos a más de 6.900 conectadas y a más de 30 empresas. Esto significó que los presentes pudieran compartir sus iniciativas y desafíos que tiene relación con la incorporación de más mujeres a la economía y al mundo de los negocios.
Hacia el futuro, estamos trabajando fuertemente en el Women Economic Forum Regional a realizarse en el mes de agosto. Además, estamos elaborando la propuesta del próximo Summit de Mujeres y Negocios para el mes de noviembre. Posterior a eso, realizaremos el Women Economic Chile 2022 en su segunda versión.
Por último, y paralelo a los encuentros, tenemos un proyecto de gestión empresarial para mujeres que va orientado a las comunidades de emprendedoras como proveedoras de grandes empresas y corporaciones, y donde se realizará un proceso de capacitación integral.
– Si tuviera que definir a nivel personal cómo vive la pandemia y la crisis social internamente ¿Cómo la definiría?
Soy una persona que le gusta mucho estar con la gente, y anteriormente era en eventos presenciales. Echo mucho de menos eso, pero por otro lado, creo que soy una optimista, y que hay muchas oportunidades que uno puede visualizar. Aprovechar ese tiempo para capacitarse son cosas que quizás antes no podíamos realizar, porque teníamos la idea que debía ser todo presencial. Hoy podemos estar participando de webinars, conferencias, summit de speaker de distintas partes del mundo, con conferencistas súper interesantes que nos están entregando todos los días alguna iniciativa nueva, un valor nuevo, una nueva oportunidad. Para mí ha sido un proceso súper interesante, me he capacitado mucho en lo que es el tema de la digitalización, en incorporar nuevas herramientas de gestión para los clientes y de marketing digital. Tengo varios proyectos, unos bien bonitos que próximamente van a conocer, así que eso también me tiene muy inspirada.
Todos los días me pongo nuevas metas y creo que lo más importante hoy es cuidarse. Eso va a marcar la diferencia, la gente que se reinventó, que vio oportunidades, va a estar lista para cuando podamos volver a salir con todo con nuestros negocios y enfrentar la nueva realidad.